viernes, 14 de agosto de 2009

"10", EL IDEALISTA PERFECTO

Se dice que la sociedad peruana y mundial está en conflicto con sus valores. Que la honestidad, responsabilidad,la laboriosidad, el altruismo y sobretodo la solidaridad cotidiana han quedado de lado para dar paso a un desencadenante de corrupción y violencia que no parece tener fin, dejando una estela diaria de desolación, angustia y desaliento en la gente. Se dice , especificamente de la sociedad peruana, que existe una tendencia a unirse a grupos poco brilllantes y mediocres que solo sobreviven de llevar abajo a gente talentosa y que aún practica los valores mencionados arriba. Que la competencia leal y basada en meritos se está extinguiendo para dar paso a una praxis de antivalores que son aceptados debido a que conllevan a la obtención de un beneficio del grupo. Así, la deshonestidad, la mentira, el timo, la falta de compañerismo entre otros se entienden si al final de cuentas esta forma de comportarnos nos proporciona la satisfacción de una necesidad.
Para las mujeres y algunos hombres que no gustan del fútbol o al menos , no lo llegan a comprender, el futbol es un deporte en donde se persigue meter un balón de cuero en un arco. 11 cojudos contra 11 cojudos corren sin mayor sentido detrás de él, sin poder usar las manos, mientras que miles o millones de personas sin tener que hacer los siguen en un estadio o por la televisión.
Para los que sabemos,sin embargo, el fútbol es, aparte de un deporte apasionante, una manera de verse retratado en un campo de grass. Mientras juega mi equipo favorito, me puedo ver a mi, a mi padre, a mis hermanos y amigos, al taxista, al médico e ingeniero, a nuestra policía , al alcalde y hasta al presidente, todos ellos, o mejor dicho, su manera de conducirse en sociedad, está representada en el campo de juego. Sin ser muy específicos, en la cancha encontramos al metedor, él que nunca da un balón por perdido, al que se pone al equipo al hombro a pesar de sus limitaciones. Encontramos también al frío definidor, que nunca duda en tomar una buena decisión frente al arco. Encontraremos también al que arruga, al que se esconde cuando el partido está al rojo. Al que prefiere que otros compañeros corran por él, sin asumir su responsabilidad con el grupo. Encontraremos también al inmaduro, al que no acepta sus errores y encima le echa la culpa a otros de sus torpezas. No faltará el agresivo, que golpea y/o insulta al rival o al compañero, que diferencia hay, si lo importante es lastimar a alguien. Y está el cobarde que se une a este tipo de conducta malsana, pero que lo hace por que así evita que le digan algo a él y se satisface con la humillación y verguenza que pasan otros.
Y ante todo esto, ¿donde está el talentoso, el que tiene inventiva, el que piensa antes y más rápido que nadie, el que elabora las jugadas y le cuesta destruir incluso las del rival , por que la belleza a de ser respetada incluso en contra de los propios intereses? ¿dónde está aquel que busca salir adelante sin mañas que dañen la integridad del rival, para quién el juego violento, el antifútbol, el destrozarle los tobillos al genio colega suyo no es parte de esta disciplina ? ¿Donde está el "10", el que se para delante de los volantes de contención y le da al balón de manera sublime, él que la lleva pegadita al pie , casi nunca la entrega mal y cuando pisa el area lo hace con decisión y sapiencia, enseñando a los demás el camino?
Tal vez será que como está pasando en sociedad, ya no hay lugar para este tipo de jugador, el idealista perfecto, que como mucha gente talentosa en otros ámbitos profesionales, tiene que resignarse a que sus "armas" no son válidas en esta guerra. No sirven, no están reconocidas por el rival. Se han vuelto lo que un escudo, una espada y una armadura en nuestros tiempos de pólvora y química. Ya no sirven por que las reglas del juego, así como el de conviviencia y sobrevivencia en el mundo real, están cambiando...
Ahora la pregunta sería ¿que será de nuestro otrora héroe, número "10"? ¿Se tendrá que esconder de las canchas para así no ser eliminado por completo? No creo que deba ser así necesariamente. Al talentoso hay que enseñarle que puede seguir siendo el mejor, el salvador constante del equipo, al que más aplauden y al que más admiran. Pero hay que hacerle ver, que ahora las reglas son distintas. Que tiene que ser rudo mientras hace su gambeta, por que normalmente será golpeado. Que será raro el caso en que se pueda llevar a más de 3 jugadores, por que ahora eso ni al arbitro le cuadra. Que debe saber cabecear y llegar como su antiguo socio el "9", por que ahora los buenos pases viene hasta del arquero. Hay que enseñarle también que tiene que marcar y y duro al que pase por su lado. Actualmente ya no hay jugadores que se queden mirando pasar al rival. Se arrojan en busca del balón o sus rodillas. En fin , hay que enseñarle que no siempre puede ser él mismo o él solo. que ahora depende más de la "pandilla", del grupo.... Hay que enseñarle que hay que ser un maldito a veces....
O. Sánchez

domingo, 2 de agosto de 2009

LOS PECADOS DE LA TÍA.

Juan Carlos Oblitas, debe ser uno de los ex jugadores peruanos más queridos y reconocidos que nuestro medio profesa y a mi entender el mejor puntero izquierdo que alguna vez nació en estas tierras. Un señor digno, de palabras acertadas y con toda la personalidad que los años, los éxitos y el cariño de una hinchada le han dado. El señor Oblitas es por estos tiempos, nominado a ejercer cargos dirigenciales en nuestro fútbol, es decir, goza de la credibilidad que pocos virtuosos obtienen. Pero al trasferir estas credenciales a su labor profesional actual, hayamos un vacío, una ausencia, una agenda inconclusa: Sporting Cristal se encuentra ubicado muy lejos de las posiciones de vanguardia, lejos de la punta con que soñaba. Cristal hace muchas fechas que no gana, 6 para ser exactos, y ayer ante Alianza Lima, evidenció ese status carente de equipo grande y se comportó como un primerizo que ha olvidado hasta los consejos propios y extraños. Cristal está en una crisis futbolística, una crisis de ideas, de conceptos y de dirección.
En el arco, existen 2 jóvenes que luchan por un puesto, un arquero con mayor experiencia y estricto como Carvallo y un felino de amplios reflejos como Heredia, ambos en proceso de maduración, uno tras de otro, ambos con deficiencias en el juego aéreo. En la defensa encontramos a un oso desgastado por el fútbol local, un potencial que se estancó en el conformismo y que suele mucho ejecutar faltas innecesarias, aún así, propone la fuerza y temple que todo equipo necesita, y busca en el juego aéreo la ventaja ofensiva, para sacar adelante los partidos. Gonzáles lo hace bien, cumple en la medida que puede, se entrega y sella cada jugada con esa garra uruguaya; hasta ahí, ¡muchas gracias! Los suplentes están destinados a ser siempre suplentes, es decir, no hay competitividad, Anchante irregular y Lojas inexperiencia, los laterales agradecidos a un buen currículo: Prado y Fernández, el primero sin la jerarquía de otros años y el segundo en un abismo técnico funcional… ¿Hace cuánto que ambos no sacan 3 centros buenos por partido? ¿Existe un recambio adecuado para ellos? Yo sigo creyendo que Edwin Pérez es un gran aporte, y que su utilidad se luce mucho más cuando juega al lado de Lizarbe, gran acierto en darle a este chico la oportunidad de la reivindicación. Arriba Lobatón y el Chorri, suficiente para el fútbol peruano, tratando de llevar el fútbol vistoso y de paciencia que Cristal a veces propone; apoyados en un “si tu quisieras” Sheput y un olvidado Sánchez. El equipo cuenta con dos delanteros útiles: Hurtado, bendecido y santificado, y Aliberti, un alero extremo de mucho empuje, que hasta ahora se estará preguntando ¿qué hizo para no ser más titular? ¿Jiménez es más que él? En además, los alientos de la banca de suplente sirven pero no solucionan nada.
Los pecados son dados cuando desobedecemos los mandamientos universales de una religión, sabidos por todos y simplificados en la cuenta de 10 para mayor entendimiento como es el caso de los católicos. Existen reglas básicas en el fútbol que deberíamos seguirlas siempre y evitar en la medida que podamos, romperlas, porque cuestan partidos… cuestan partidos. Un equipo se arma de atrás para adelante, asegura el cero primero, que arranquen los mejores, el fútbol es de momentos, no es necesario ser 9 para ser goleador, la competitividad eleva el rendimiento, la jerarquía importa y la camiseta hay que sentirla, etc. Yo pregunto: ¿Erick Delgado se fue por bajo rendimiento? ¿Los jales de la temporada, eran pretendidos por otros clubes grandes acaso? ¿Era un dilema escoger entre Silva o Maestri, sabiendo que el primero es mucho más que el segundo? ¿Si Prado está de salida, a quién se está trabajando para que cubra ese puesto? ¿Tiene Cristal un lateral izquierdo de nivel? ¿Era Malingas el jale que necesitaba Cristal? ¿Cuenta el Sporting con 6 suplentes mínimos de igual nivel que los titulares? ¿Es justo quitarle la confianza a Carvallo por un partido malo cuando Heredia al principio tuvo varios de bajo rendimiento? ¿Dónde está esa actitud vencedora y de seguridad que debe profesar un equipo como Cristal? Yo recomiendo jugar con Anchante de lateral izquierdo, “asegura la zona antes de atacar”, arriba que ingrese Sheput y que el Chorri juegue en la posición que nos dio tantas alegrías, detrás del punta, detrás de Hurtado; que se deshaga de algunos jugadores y se contrate para reforzar la defensa, un buen volante ofensivo y claro, un “9” verdadero, un buen delantero siempre es útil; yo jugaría igual con 3 enlaces que intercambien roles y arriba el “Vagón” siempre hará daño, es sabido que a mayor variantes, mejor . Habrá que volver a tocar el tema, habrá que seguir preguntando, habrá que confiar en Hurtado, Lobatón y Lizarbe, habrá que intentar resolver la crisis, ojalá.
El Haro....